miércoles, 30 de marzo de 2016

a dos golpecitos de corazón
de que te cambie la suerte
y que el giro sea fatal
hermoso otra vez
trágico otra vez;
no hay costumbre que alcance
a apagar el vértigo;
dos golpes
y el primero es todo ansiedad
el vacío y su preludio
haber llegado lo más alto
o lo más bajo

me quedo anclado ahí
el segundo golpe no llega
y en ese espacio morir
con el suspenso;
y si abriera los ojos
todavía una vez más
sabré que me dormí
durante la mejor parte
como es costumbre;
la eterna costumbre
de la corriente
y pensar sólo
en el suspenso del mar

viernes, 25 de marzo de 2016

no es un dios
ni dios es una musa
pero aún siempre
un silencio que corta
la más fría de las tardes
corta mi campera
mis calzones
y mis medias
me corta la espalda
partida en dos
por donde se cuela
la ausencia

no sé quién sos
y sueño con escribirte
tanto y tan justo
que lo puedas leer
en la frontera donde nos tocamos
y dejamos de ser

no sé
y te sueño
como si pudiera tocarte
de sólo pensarte
pero sabés
yo sé
que no sé quién sos
y no puedo tocarte
como soñás
porque mirás para otro lado
a cada rato
y no sé lo que ves
no puedo tocarte
en sueños

no puedo saltar el muro
si es lo que nos esconde
no puedo tocarte
si no sé lo que leés
todas mías
las manos que me agarran
todos susurros
de mi voz
disparando alarmas
no sé de qué
qué
nunca estuvo claro
y de repente te ahoga
quizás por mi insolencia
de preguntar qué

llevo manchas sobre manchas
no son las manchas
no son cicatrices
es estar atado
a algún lugar
que desconozco por completo
y tira, tira, tira
y juego a creer que voy
apenas porque no existe pausa
porque no puedo ser
en armonía con el qué

el qué soy yo
y nunca se manifiesta
el qué es mañana
y ahí se va